La semana pasada, Pharrell Williams fue nombrado director creativo de las colecciones masculinas de Louis Vuitton. Un anuncio que ha el mundo de la moda, suscitando tanto aplausos como críticas.. Pero mientras se discute la legitimidad de Skateboard P para dirigir una empresa tan prestigiosa como LV, los sneakerheads se hacen otra pregunta: ¿no cambiará este nombramiento el juego de las zapatillas?

La pregunta, legítima, tiene su origen en los vínculos existentes entre las industrias del baloncesto y del lujo. De hecho, el grupo propietario de Vuitton, LVMH, es cercano a Nike, como demuestran las colaboraciones de sus casas, desde LV a Dior pasando por Tiffany, que lanzará unas Air Force 1 Low en marzo. Pero Pharrell es fiel a adidas. Y el enemigo acérrimo del Swoosh está aliado con el competidor insignia del nuevo empleador de su potro, el conglomerado Kering, con cuyos representantes más prestigiosos se cruzó el año pasado, Gucci y Balenciaga. ¿Se trata de un posible conflicto de intereses? Y en concreto, ¿querrá LVMH que Pharrell deje de lado su colaboración con las tres rayas o, por el contrario, se acercará más a adidas con su presencia en detrimento del Swoosh? Estos son los debates que agitan a los sneakerheads en estos momentos.

No cabe duda de que las colaboraciones de Pharrell se han discutido en el marco de sus negociaciones con LVMH. No sabemos si al artista se le ha concedido el derecho a continuar con sus otras colaboraciones, pero de momento es así: ha podido presentar estos días su nueva collab con Moncler, otro competidor de LV, o bromear con la llegada de un nuevo colorway de su NMD S1 para adidas. En cuanto a saber si su persona por sí sola podría redistribuir las cartas del juego, un ejemplo preciso puede dar algunas pistas.

Este ejemplo viene de alguien cercano a Pharrell: Nigo. El diseñador japonés, al frente de Kenzo, otra marca de LVMH, desde septiembre de 2021, es también un viejo conocido de adidas. Y su nombramiento no ha cambiado el panorama, ni sus vínculos han entorpecido a los distintos actores de su entorno. Como prueba, el fundador de BAPE sigue equipándose con las tres rayas e incluso se tomó la libertad de lucir la nueva collab bajo su etiqueta Human Made alrededor de las ADIMATIC en el desfile SS23 de Kenzo. En las industrias ultracompetitivas del lujo y la ropa deportiva, parece que la gente está dispuesta a algunos compromisos. Y en el momento de escribir estas líneas, estamos más cerca de un statu quo que de una revolución en el mundo de las zapatillas con el nombramiento de Pharrell en LV. Sin embargo, como siempre... ¡continuará!


Journaliste sneakers, mode, lifestyle. Auteur du livre "Sneakers Obsession".